Complementos alimenticios y vitaminas en «Expo eco salud».
Expo Eco Salud.
Entre el día 18 y 20 de mayo tuvo lugar la 27ª edición de «Expo eco salud 2018«.
En este encuentro se dan cita diferentes profesionales del ámbito de la salud y vida natural.
Destacan los productos ecológicos y naturales para llevar una vida más sana.
También hay un amplio surtido de complementos alimenticios, vitaminas y productos dietéticos asociados a programas de adelgazamiento y óptimo cuidado de nuestro cuerpo.
Hay una infinidad de terapias naturales que abordan todos las áreas del bienestar de la persona.
Técnicas de relajación y descanso en «Expo eco salud».
Hay varias conferencias y charlas sobre diferentes temas de mucho interés así como informaciones y cursos.
Otro área muy extensa es la relacionada con la actividad física y saludable.
Nos acercamos a fechas en que hay cada vez menos horas de luz y a la vez un mayor contraste entre las temperaturas diurnas y nocturnas.
Con frecuencia las primeras semanas de otoño son cálidas y durante el día hay, en las horas centrales y por la tarde, temperaturas primaverales. Pero al pasar al interior de una casa, edificios, o transporte público, la temperatura cae. También en cuanto se pone el sol, el mercurio se desploma rápidamente.
Todo esto ocasiona enfriamientos y resfriados sin darnos cuenta. Muchas veces parece que hace calor y el hay sudoración en la piel de modo que este proceso se detiene bruscamente al cambiar de lugar, y se produce el típico constipado.
Ocurre con frecuencia tanto por el desarrollo de una actividad o ejercicio físico o cuando estamos quietos bien en trabajos de escritura y lectura, o de ocio como viendo un espectáculo o paseando. Sin percibirlo el cuerpo va perdiendo temperatura muy lentamente y cuando nos damos cuenta ya es demasiado tarde.
Otras veces esto ocurre mientras dormimos. Al acostarnos la temperatura es fresca pero esas sábanas y colchas empleadas, a las pocas horas, aún son demasiada ropa para este otoño cálido. De repente sudamos por esas sábanas y edredones, y nos desarropamos. Al poco rato, dormidos y sin abrigo, nos enfriamos y ya está servido el constipado.
Ropa de abrigo para protegernos de día y durante el sueño.
Son las fechas más proclives para esta clase de dolencias el otoño y la primavera. Difícilmente nos resfriaremos en el verano, salvo por el abuso de los aires acondicionados, o en el invierno, en donde podemos pasar de lugares con una calefacción alta a entornos ambientales más fríos.
La mejor manera de prevenirlo es usar la ropa justa y adecuada. El cuerpo tiene una alta capacidad de autorregulación pero eso no quiere decir que no le podamos echar una mano estando pendientes del clima y el entorno.
Si ya hemos empleado el abrigo necesario y promovemos el uso de la energía sostenible con los sistemas de calefacción necesarios y justos, otra manera de prevención a nivel orgánico es reforzar nuestro cuerpo con sustancias naturales.
Lo más apropiado es alimentarnos de manera equilibrada tomando alimentos que dotan a nuestro organismo de las vitaminas, minerales y oligoelementos propios para el desarrollo óptimo de su actividad vital.
Otro aspecto necesario es el descanso. Muchos de los problemas y dolencias que se padecen en la actualidad debido a los hábitos seguidos, se pueden remediar con sosiego y descanso.
Por una malentendida competencia sobre todo laboral, se descuidan aspectos básicos como el descanso, conduciendo a un punto de estrés elevado que se combina con menos horas de sueño precisamente porque no podemos conciliar el sueño.
Esa situación lleva a la enfermedad debido a que el cuerpo en algún momento se descompensa y para defenderse, se viene abajo, produciéndose así un período de recuperación vital mediante sobre todo descanso.
Hierbas y productos artesanales para reforzar nuestro organismo.
Existen, como se comentaba, una gran cantidad de sustancias naturales que pueden reforzar nuestro sistema inmunitario. Estas sustancias sirven siempre que se cumpla todo lo anterior, como la alimentación y el descanso.
También hay un aspecto que es crucial en todo esto. Se trata de nuestro estado emocional.
Esas situaciones en forma de amor y desamor, de orden afectivo, de tipo familiar, amistad, y con frecuencia laboral, por exceso o defecto, tienen un impacto sobre nuestra salud emocional lo que se trasladará a una afectación de nuestro estado de salud físico.
Por eso, muchas veces, ante un disgusto o una decepción, o una expectativa no cumplida que nos interesaba mucho, enfermamos de alguna manera. Eso puede ser desde un enorme resfriado, a un estado de ansiedad o situación depresiva.
En cualquier caso, mejor prevenirlo, aunque para esto no hay vitaminas en frasco. Más la prevención se encamina a estar bien acompañados.
Las sustancias más comunes son desde toda clase de tés e infusiones de hierbas medicinales. También podemos ampliar los tipos de frutas y verduras, que podremos consumir mediante postres, menestras y batidos, para estar llenos de todos esos elementos.
El consumo de miel y sus derivados son otros remedios caseros que se emplean junto a zumos y batidos con cereales para dar aportes extraordinarios a nuestro cuerpo.
Mediante la industria farmacéutica se publicitan muchos medicamentos y otros productos más bien de tipo homeopáticos que nos pueden dotar también de estas sustancias. Aunque no servirán de nada si no se siguen los hábitos saludables que antes se indicaban.
Vegetales y alimentos sanos para una dieta rica, sana y equilibrada.
A veces presionados por una vida que se llena de muchísimas obligaciones, tareas y actividades estresantes, algunas personas se abalanzan sobre estos complejos vitamínicos para poder cumplir con toda esa carga. Son como un estímulo que puede funcionar para momentos breves y excepcionales.
Pero es más sensato recalcular todas esas tareas que realizamos para ver si encajan dentro de una vida plena y razonable. Tal vez debamos evaluarlo todo y reestructurarlo en un modelo más acorde con nosotros y lo que queremos.
También mediante lácteos la industria alimentaria se ha puesto en marcha para incluir dentro de estos preparados compuestos de tipo inmunológico. Igualmente que los de tipo farmacéutico su uso no deberá ser un sustitutivo de los demás hábitos, y su uso puede resultar adecuado para períodos breves y concretos.
Su consumo habitual ocasiona que nuestro cuerpo deje de producir esas sustancias de manera natural.
El cuerpo cuando enferma, por una parte se le debe ayudar mediante ese descanso y vitaminas naturales, pero por otro, esa situación es una oportunidad magnífica de estimular en el organismo sus defensas naturales.
Al final casi ningún medicamento sirve si el cuerpo no se quiere cuidar.
Medicamentos y complementos nutricionales para curarnos.
Dárselo todo hecho es un error que a largo plazo pagaremos muy caro porque ante cualquier pequeño problema futuro que se encuentre, tropezará estrepitosamente y será necesario siempre darle todos esos complejos vitamínicos, aportes y medicamentos de manera artificial.
También en el cuerpo se produce una evolución y aprendizaje natural. Si se lo impedimos, caminaremos hacia una involución orgánica.
Seguir los hábitos antes mencionados, nos dará una mayor ventaja cuando debamos afrontar futuras dolencias, haciendo algo tan simple como tener una vida social sana, hacer deporte, comer y dormir bien.
____________________________________________ Nota: «Todos estos consejos son generales, y para una alimentación sana, es siempre necesario el consejo personalizado y especializado de tu Médico de Familia o Dietista titulado así como profesionales pertenecientes a Organismo Oficiales de Salud Pública.»
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El verano en su recta final se une al otoño en la producción de distintos frutos. Conviven los frutos del verano con los más prematuros del otoño, tales como las uvas.
El higo es uno de esos frutos apreciados por sus propiedades, contenido en azúcares vegetales y vitaminas.
El higo procede del árbol de la higuera y se recoge en el mes de agosto y septiembre.
La higuera crece sobre todo en regiones del Mediterráneo y regiones de Asia de donde es originario, tratándose de un árbol de gran porte que da frutos a los pocos años de ser plantado.
Higos maduros y jugosos.
También se encuentra este árbol en el hemisferio Sur.
No obstante existen más de setecientas especies de higos aunque solo algunos son comestibles. Su recolección comenzó hace milenios siendo conocido desde la Edad del Bronce.
El higo se puede consumir fresco o bien dejase secar al sol para que pierda toda el agua. Cuando ocurre esto, el higo seco en proporción al volumen que le queda, concentra todos los azúcares y propiedades.
A veces se protege con algo de harina para tapar sus poros cuando ya está del todo seco. Se consume de este modo a finales de otoño e invierno siendo una manera de desecación de frutos al igual que ocurre con las uvas pasas y que permite su aprovechamiento fuera de su época de recolección.
El higo fresco que se consume directamente del árbol tiene un sabor muy dulce. Es considerado una fruta muy dietética de manera que es asimilado por el organismo de una manera rápida.
Higo chumbo de chumbera e higo de higuera.
También en esas fechas se pueden consumir los conocidos como higos chumbos. Estos higos proceden de las chumberas que son un tipo de cactus que crece en regiones del mediterráneo y semidesérticas.
Las chumberas se adaptan a cualquier clase de terreno. Su floración comienza en el mes de mayo y esas flores serán después los higos chumbos que se recogerán en el mes de septiembre. Su tamaño comparado con el de los higos de higuera es doble y triple.
En la preparación de estos higos chumbos se cuida de que sus espinas no nos dañen. Al ser un cactus, es posible que las pequeñas espinas del higo perforen nuestra piel al tocarlos. Para eso se emplean guantes en su limpieza para pasar después a ser lavados y así arrastrar todas las espinas desprendidas.
Higo chumbo de chumbera maduro y jugoso.
Los higos se pueden consumir solos o ser el acompañamiento de postres más elaborados. Es frecuente verlos en macedonias mezclados con helado y nata, melocotón, y zarzamoras.
En alguna ocasión puede ser parte de la decoración de comidas en donde su sabor dulce realza el sabor salado de distintos guisos.
En otros casos algunos higos pequeños se sumergen en aguardiente durante un par de meses para que asimilen los alcoholes. Después, suele ser frecuente su consumo, igualmente que antes, en distintos guisos.
En el caso del higo seco, en invierno, se suele consumir junto a frutos secos de la estación pasada. Un dulce muy sencillo consiste en abrir uno de esos higos secos e introducir una nuez o avellana pelada. Popularmente se le conoce como «turrón de pobre» porque era mucho más económico.
Higos maduros de color verde.
Es una combinación muy nutritiva y calorífica, rica en hidratos y azúcares, muy apreciados en esas fechas de grandes fríos, combinación que contrasta con esas otras que se mencionaban en postres veraniegos.
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Nota:
«Todos estos consejos son generales, y para una alimentación sana, es siempre necesario el consejo personalizado y especializado de tu Médico de Familia o Dietista titulado así como profesionales pertenecientes a Organismo Oficiales de Salud Pública.»
Lo más apropiado para llevar una alimentación sana es realizar varias comidas al día.
Se trata de ingerir alimentos a lo largo del día de una manera moderada. Esto quiere decir que si nuestro organismo necesita realizar un aporte diario de un determinado número de calorías, serán esas mismas pero distribuidas, a ser posible, en al menos cinco ocasiones.
A veces nuestro cuerpo no tiene apetito o bien, por los motivos que fuera, se encuentra saturado de alimentación.
Después de alguna serie de celebraciones sociales en donde tal vez hallamos degustado distintos menús, es posible que debamos dar un descanso a nuestro organismo. Así en ese sentido, sin entrar en dinámicas de dietas, es posible descargar a nuestro cuerpo de nutrientes para que él mismo agote parte de sus reservas.
Son llevados a cabo con frecuencia los conocidos ayunos. Éstos tienen como misión la de dar un descanso al estómago y en general al organismo.
Pueden hacerse estos ayunos sólo en la primera mitad del día, continuando después con una alimentación frugal, o por el contrario se puede realizar durante el día completo.
En ambos casos sí se debe mantener la hidratación del cuerpo, mediante la bebida de agua mineral, agua con gas, o del grifo si ésta es buena, o bien mediante infusiones o tes.
Es recomendado este ayuno en aquellos casos en que no se deban realizar ejercicios físicos importantes o bien llevar a cabo tareas que pudieran ser peligrosas o requieran una atención importante.
Así si tienes una tensión arterial baja debes vigilarlo para evitar sustos.
Por esa razón es aconsejable ingerir frutas o verduras que mantengan un aporte de azúcares al cuerpo de manera estable y constante.
Si se elige esta última opción, es posible prepararse postres naturales de lo más sanos.
Una idea es la de crear una macedonia surtida que en este caso podría llevar los siguientes ingredientes:
– Piña
– Sandía
– Naranja
– Plátano
– Manzana
sugerencia de presentación
Puedes también elegir sólo parte de dichos ingredientes.
Influye mucho la época del año pues hay algunos alimentos que son más propios de estaciones como la primavera y el verano.
En tiempos con más calor, estos postres pueden contener más frutas acuosas como la sandía o la piña lo que te dará un mayor aporte de líquidos.
En la sugerencia de presentación se ha escogido Piña, Naranja y Sandía que son un conjunto acuoso, ácido y refrescante.
La cantidad a preparar dependerá de si será sólo para acompañar ciertas horas o bien si será esa toda la alimentación para ese día.
En cuanto lo hallas preparado calculando las cantidades necesarias, las distribuirás en varias raciones para su consumo durante todo el día.
Además de esta preparación con frutas puedes elegir otras combinaciones con sólo verduras y hortalizas o bien combinaciones mixtas en donde puedas mezclar alimentos relacionados.
Sería el caso de la preparación de una ensalada de Tomate Raff, Naranja, Nísperos y Zanahoria.
Todas estas combinaciones son muy provechosas para el organismo ya que le proporciona la hidratación necesaria y vitaminas muy importantes.
Puedes probar Tú tus propias combinaciones para ir descubriendo cuáles son aquellas que mejor se adaptan a ti, cuáles te funcionan mejor y cumplen tus expectativas de nutrición.
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Nota:
«Todos estos consejos son generales, y para una alimentación sana, es siempre necesario el consejo personalizado y especializado de tu Médico de Familia o Dietista titulado así como profesionales pertenecientes a Organismo Oficiales de Salud Pública.»
La alimentación consiste en la nutrición de nuestro cuerpo mediante alimentos.
El cuerpo para sobrevivir necesita desde un punto de vista fisiológico un entorno y medioambiente que le proporcione aire y agua así como elementos básicos.
Después, los alimentos que lo nutren. Así se incorporan al organismo azúcares, proteinas, vitaminas y aminoácidos entre otros. A un nivel nutricional es recomendable llevar una alimentación diversificada a través de distintos alimentos.
Alimentación sana consiste pues en proporcionar al organismo los nutrientes que necesita en cantidad, frecuencia y calidad.
La cantidad es muy importante porque el dar al cuerpo un exceso de todos esos alimentos que no necesita y no puede eliminar, lleva al organismo a una situación difícil, de modo que comenzará a acumular ese exceso y por otro se producirán desórdenes en su interior.
Si la cantidad es poca ocurrirán carencias nutricionales que pueden llevar al organismo a anemias y anorexias y por tanto un colapso en el sistema que pondrán en peligro su vida.
La frecuencia en la ingesta de estos alimentos necesarios es de mucho interés porque no es tanto ya la cantidad apropiada de alimentos que se ingiere a diario sino su correcta asimilación por el organismo.
En este sentido, podríamos estar tomando a diario las cantidades marcadas pero en un orden inverso, y además agrupadas en momentos muy puntuales.
Es el caso de personas que realizan sólo dos comidas al día o una pero que es excesivo de una sola vez. Lo que ocurre a continuación es una digestión muy pesada, difícil, con un desgaste a nivel orgánico enorme y con una pérdida considerable de nutrientes en todo el proceso.
Lo más apropiado es alimentarse varias veces al día en pequeñas cantidades de modo que esos nutrientes sean repartidos por todo el cuerpo de un modo correcto.
Si es posible, lo más recomendable según los expertos es realizar un mínimo de cinco comidas al día, siendo las más fuertes a primeras horas, y las más livianas según va terminando el día.
Y por último lo mejor es que los alimentos sean naturales. Es posible que esto no sea siempre posible sobre todo por los estilos de vida personales. Pero de poco servirá comer con frecuencia las cantidades apropiadas si al final el alimento no reúne los estándares mínimos.
Se considera un alimento sano aquel que es consumido en un medioambiente sano:
alejado de contaminantes en el aire y suelo
alejado de químicos para su protección frente a insectos o el uso de abonos artificiales para favorecer su crecimiento
con un tiempo lo más reducido posible desde que es recogido hasta su consumo evitando por supuesto su conservación en cámaras de refrigeración
procedentes de semillas naturales, que pueden ser seleccionadas, pero sin alteración genética
y desde un punto de vista medioambiental además, serían todos esos alimentos que desde su producción por medios naturales hasta su consumo, tienen un impacto ambiental reducido, siendo lo más aconsejable el consumo de productos estacionales y cercanos al lugar donde vivimos. De esta manera se ahorra en transporte, combustibles y energía de mantenimiento de cámaras de refrigeración.
Debemos dibujar un plan de comidas mensual en donde se incluyan todos los alimentos que necesitamos. Si no sabemos, podemos acudir a un nutricionista o dietista, social o privado.
Además de la alimentación, tendrá una influencia crítica en nuestro estado de salud el llevar una vida equilibrada de manera que se realice un cierto ejercicio físico diario, se descanse el tiempo necesario, y se tener una vida afectivo-social y mental adecuada.
Beber un agua limpia y sana nos permitirá fortalecer nuestro cuerpo con una hidratación adecuada a la vez que aportamos minerales esenciales.
Y respirar aire puro también favorecerá una buena salud. En el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono, con un aire limpio nuestras células tendrán un mayor aporte de este gas y a la vez evitaremos la entrada a los pulmones de otras sustancias nocivas presentes en aires viciados y contaminados.
Verduras y Hortalizas en Huerta Ecológica
Cuanto menos tiempo nos expongamos a esos entornos nocivos, mejor.
Cada vez más se considera que la mayoría de las enfermedades tienen un origen ajeno al propio organismo y lo sitúan más en el medio circundante.
En este sentido el medio puede ser físico y lo que nos puede afectar es el aire contaminado o bien un agua que no esté lo suficientemente tratada o bien se halla tratado en exceso mediante químicos.
Puede ser que dentro de nuestro entorno halla una cantidad de ruido excesiva o muy frecuente y que además existe un alta exposición a radiaciones de todo tipo.
También la ausencia de Sol impide que el organismo desarrolle ciertas funciones sobre todo en la producción de vitaminas, de regulación del sueño, y en el estado anímico.
A parte, el medio psíquico y mental juegan un papel crucial en nuestra salud.
Según cuentan ya una mayoría de expertos, el estar rodeados de personas con una mentalidad optimista, colaborativas y con un desarrollo afectivo adecuado, tendrá una influencia positiva en nuestra salud de manera que todos los procesos anteriores se vean fortalecidos.
En el caso contrario, los conflictos personales, afectivos, laborales, las situaciones de presión y estrés continuadas y el no saber afrontar ciertas situaciones, influirán con seguridad sobre nuestra salud de manera que posibilitarán que nuestro cuerpo enferme con una frecuencia mayor a la normal además de generar estados crónicos de dolencias que conduzcan a daños mayores.
Para gozar de una buena salud ayudará prestar atención a todos estos aspectos mencionados.
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Nota:
«Todos estos consejos son generales, y para una alimentación sana, es siempre necesario el consejo personalizado y especializado de tu Médico de Familia o Dietista titulado así como profesionales pertenecientes a Organismo Oficiales de Salud Pública.»
